Las diez tecnologías clave para la reindustrialización en España
Después de proponer en la anterior entrega de esta serie las objetivos que se deberían alcanzar como consecuencia de la futura Ley de Industria, en esta ocasión nos queremos detener en una reflexión acerca de las tecnologías que deben acompañar al proceso de reindustrialización en España.
Desde hace muchos años son múltiples las aproximaciones que se han formulado para empujar desde las tecnologías la mejora de la competitividad de los países. En estos momentos la dificultad para elegir es mucho mayor en función de la enorme disrupción que ha supuesto la aparición de todo lo digital en esos mundos. Nos atrevemos a afirmar que casi ninguno ha quedado inmune a la influencia de la digitalización y por poner un ejemplo que lo caracterice, nadie discute hoy que no se habría avanzado con la misma intensidad en el mundo de la sanidad sin la tremenda ayuda de la computación y las medidas consecuencia del uso de los sensores orientados a la observación de los principales rasgos del ser humano.
En ese entorno complejo, situados en el dilema de elegir determinadas tecnologías para el avance de los países respectivos, ha aparecido, en fechas bien recientes, una propuesta que ayuda a iluminar el camino a tomar. Nos referimos a las iniciativas que impulsan resolver asuntos relevantes para la vida de la ciudadanía y en consecuencia apostar por la tecnologías que hacen viable esas soluciones. Pasamos por lo tanto de elegir lo que nos parece más innovador en términos generalizados a lo que es más eficiente para la resolución de problemas más cercanos. Así hablamos de MISIONES como el tópico que mejor define esta aproximación.
Aproximándose a este acercamiento de las tecnologías imprescindibles para la sociedad española, la Catedra Ciencia y Sociedad de la Fundación Rafael del Pino ha elaborado en fechas recientes un libro, basado en el criterio de un grupo de expertos científicos y tecnólogos, que selecciona un decálogo de 10 tecnologías que buscan la mejora de la nuestra economía, a través de la industria y consecuentemente del empleo. Merece la pena nombrar las seleccionadas que responden a esos criterios descritos en el párrafo anterior: la Inteligencia Artificial Generativa, los Nuevos Textiles, el ARN Mensajero, las Tecnologías contra Incendios forestales, la Reinvención del Hogar y la Construcción, la computación Cuántica, la Ciberseguridad, el Diagnostico Inteligente, las redes Privadas 5G y WIFI 7 y los Reactores modulares para la energía nuclear.
Cualquiera de estos tópicos recoge la suma de los conocimientos diversos que se necesitan para disponer de las soluciones imprescindibles para resolver los problemas planteados. Existen problemas con múltiples fuentes de innovaciones, tales como el de los Incendios Forestales que con tanta intensidad amenazan a nuestra península ibérica y algunos más específicos como el de las Comunicaciones 5G y WIFI 7. Lo que es innegable es el efecto corrector de problemas para la ciudadanía que supone orientar los avances tecnológicos a la corrección de los problema que se viven ahora mismo o se van a vivir en el futuro próximo.
Las ciudades del futuro, el Hogar del presente, las capacidades de gestionar nuestra industria más potente, el Turismo, las Comunicaciones como la garantía de la igualdad de acceso al conocimiento, las soluciones a la demanda creciente de energía, entre otros aspectos deberían de constituir los enfoques a los que la futura reindustrialización española tiene que encaminarse y encontrar soluciones.
Envolviendo todos los desarrollos anteriores se encuentran los nuevos elementos básicos que son los pilares de las siguientes formulaciones: los datos y su consecuencia en la Inteligencia Artificial. Nada se puede concebir en estos momentos si no se tiene en cuenta en su diseño y desde el origen cómo y para qué se van a utilizar los datos que emergen, a través de múltiples fuentes, en todo proceso productivo.
Como un nuevo elemento, también un tanto inesperado, nos encontramos con las exigencias que como sociedad avanzada tenemos que considerar alrededor de las necesidades de la Seguridad. No es posible, si queremos defender los valores que sostienen el modelo de convivencia que Europa ha creado tras los terribles choques vividos en el siglo XX, ignorar la necesidad de poner entre otras en la bandeja de las tecnologías las que nos aseguren la seguridad en el medio y largo plazo.
La enorme ventaja que tenemos como país es que, en las diez tecnologías identificadas, en la gestión de los datos y en la seguridad, así como en otras distintas que se pudiesen sumar a la lista, disponemos del talento capaz de encontrar las respuestas a los retos y también de los lideres empresariales que pueden hacer realidad la ardua tarea de llevar los desarrollos a la realidad. Es por lo tanto una tarea de decisión política la de identificar la Misiones que situamos como retos para los próximos años. De manera inmediata y en los programas específicos ya creados, los PERTES por ejemplo, se deberían apoyar las tecnologías que hagan posible su satisfactoria resolución en los cortos plazos disponibles.
Imagen de Jorge Franganillo en Pixabay
Grupo de Reflexión de AMETIC