Crónica lunes, 2 de septiembre de 2024 TARDE #Santander38

CARME ARTIGAS

 

Carme Artigas aboga por el desarrollo de una gobernanza mundial de la IA sobre la base de incentivos de mercado

La exsecretaria de Estado y copresidenta del Órgano Consultivo de Alto Nivel de la ONU advierte que la regulación mundial es necesaria por equidad y como prevención de una tecnología que es capaz de evolucionar sin intervención humana

Una gobernanza mundial de la inteligencia artificial es necesaria para garantizar la equidad en el acceso y reparto de beneficios a escala planetaria, pero también porque se trata de la única tecnología que puede evolucionar sin intervención humana. Y esta gobernanza mundial ha de procurarse introduciendo mecanismos de mercado para su incentivación.

Carme Artigas, que ha sido secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial y copreside el Órgano Consultivo de Alto Nivel sobre Inteligencia Artificial de la Naciones Unidas, ha intervenido de esta manera en el 38 AMETIC Encuentro de Empresas Digitales y Telecomunicaciones, que se desarrolla en Santander, en el marco de la UIMP. Artigas ha centrado su intervención en la co-gobernanza de una IA a escala global.

Artigas ha abogado por dotar a los países de “mecanismos para asegurarnos de que te portas bien, de que la industria no contamine elaborando modelos de lenguaje, por ejemplo. Tenemos que trabajar los incentivos de mercado para portarme bien -ha dicho-. No queremos coartar el desarrollo”, pero ha de haber una gobernanza global, “unos premios y castigos”.

A su juicio, actualmente hay una discordancia entre beneficios y costes del desarrollo de la IA. Desde 2023, este ha alcanzado una “actividad brutal, que se acelera”, por lo que es hora de “una convergencia regulatoria internacional para una gobernanza”.

Ha indicado que solo hay siete países en el mundo que participen en todas las iniciativas reguladoras que se están llevando a cabo, pero la realidad es que no hay una gobernanza global aún y que “la IA se está desarrollando en el norte global, solo con datos del norte global y chips del norte global”.

“La actual situación consolida el statu quo -ha añadido-. La gran oportunidad es cómo garantizar que los desarrollos y sus beneficios impacten a todo el mundo y sobre todo al sur global”.

Riesgos a corto y largo plazo

Entre los riesgos que la desregulación acarrea, Artigas ha incluido la capacidad de la IA de evolucionar sin intervención humana, pero también un déficit de responsabilidad y de capacidad de respuesta global en caso de crisis.

“A pesar de los esfuerzos de las compañías, hay un gran déficit de la gobernanza, de inclusión, de representación y de acceso a los datos. Y también el déficit de la responsabilidad. ¿Quién es responsable si hay un incidente de IA? Tampoco hay ahora una respuesta global a eso”, ha valorado la exsecretaria de Estado.

Los efectos de la IA son a escala global y sin excepciones, tanto económicas como sociales, y no es ajena a la geopolítica, pero hay más: “Puede afectar a todos los sectores productivos, a la sociedad y también es la única tecnología que puede seguir evolucionando sin intervención humana. No habrá segunda vuelta sin regulación. Hay riesgos a corto y largo plazo como perpetuar las diferencias”.

En la propia génesis de la IA está una de las causas de la dificultad de autorregularse: surge principalmente de las empresas, no de las universidades, lo que afecta a la trasparencia del sistema.

“En el porqué está el qué –ha dicho en referencia a los cometidos a realizar–: que haya transparencia. Queremos que la inteligencia artificial funcione para el bien de la humanidad, que nos pongamos de acuerdo en mínimos: derecho internacional y derechos humanos. Esto cuesta porque hay competencia y lucha de bloques”. Pero “no podemos competir en seguridad y en derechos humanos”.

 

“El Pacto por la Reindustrialización se encuentra en un buen momento en España y en Europa”

El director general de Estrategia Industrial anuncia que la nueva ley contemplará la elaboración de planes por sexenios para detectar empresas y sectores estratégicos que afiancen la soberanía del país

El Pacto por la Reindustrialización se encuentro en un contexto adecuado para que se lleve a cabo, tanto en España como en Europa, y el instrumento para corporizarlo es la Ley de Industria que el Gobierno de España espera tener aprobada a finales de año.

Así se ha manifestado el director general de Estrategia Industrial, Jordi García Brustenga, uno de los intervinientes en el debate que, sobre esta también demanda de las empresas tecnológicas, se ha llevado a cabo en el 38 AMETICA Encuentro de Empresas Digitales y Telecomunicaciones, que se desarrolla en Santander en el marco de los cursos de la UIMP.

En la mesa de debate han intervenido Jordi García Brustenga, director general de Estrategia Industrial y de la Pequeña y Mediana Empresa, del Ministerio de Industria; Ana Ursúa, directora general de la Asociación de la Industria Navarra; y Guillermo Dorronsoro, miembro del Grupo de Reflexión de AMETIC. Ha moderado el debate Ezequiel Navarro, miembro del Comité Ejecutivo de AMETIC y coordinador de la propuesta de AMETIC de Pacto de Estado por la Reindustrialización.

García Brustenga ha informado al foro que el Pacto de Estado se encuentra en “un buen momento en Europa y España, un momento dulce de sensibilidad por lo que es la industria. Estamos ganando puntos de foco y capacidad de actuación”, como consecuencia de la transformación digital, ecológica, la pandemia que ha puesto en alerta, las guerras, la guerra comercial… En su opinión, se está en un momento con suficiente “motivación para un Pacto de Estado, para que en el país vayamos todos a una”.

“Lo mejor para marcar las bases es una Ley de Industria -ha añadido-. En 1992 se aprobó la última Ley de Industria y ahora toca hacer otra cosa, una ampliación del tablero de juego mucho más grande. Hemos hecho una segunda audiencia pública y se han incorporado 400 de las sugerencias para que sea la ley de todos”.

El alto cargo en la materia ha vaticinado en el debate que estrategias de desarrollo como los PERTE pueden tener continuidad en el futuro, una decisión de la nueva Comisión Europa que está negociando el Gobierno de España, pero también ha considerado que la ley establece el marco para el desarrollo de planes estratégicos a seis años vista con la vista puesta en la autonomía industrial del país.

“La ley supone haber aprendido de lo vivido estos años con los PERTE y las inversiones estratégicas; y también intenta llegar a jóvenes, territorios e inversores para que opten por la industria y creando un marco para que las autonomías y los municipios trabajen sobre la legislación”, ha comentado Brustenga. Finalmente, la ley garantizará la ‘autonomía estratégica’ de España, “ya que la industria no solo es promoción económica y empleo, sino también seguridad nacional.

“A partir de la aprobación de la ley, con el cambio de año, habrá una estrategia cada seis años, que identifique sectores estratégicos, con retos de país. Pero también incorporamos otros dos pactos: el de la innovación, que tendrá un capítulo entero en la ley; y un pacto educativo sobre el talento”, ha concluido el director general.

Ana Ursúa ha considerado que España, que se marcó en 2014 el objetivo de “tener el 20% de Industria en 2020”, aún le queda “mucho que desarrollar” y ha recordado que las regiones más competitivas y con una mejor redistribución de la riqueza son las industriales. “Por eso son necesarios los tres pactos: industria, educación, innovación”, ha apostillado.

Ha coincidido Ursúa con los demás ponentes en que “estamos en un buen momento” pero “hay que impulsar porque el cambio en este país ha de ser grande.”

En su intervención, Guillermo Dorronsoro, ha compartido la idea del buen momento que se vive, ya que “se ha recuperado la conciencia de que la industria es muy importante”, pero también ha transmitido “la mala noticia de que requerirá tiempo y de que habrá que sostener la apuesta después de los PERTE y el Next Generation”.

Fiscalidad y tamaño

La mesa de debate también ha alcanzado el consenso en la necesidad de que la industria española desarrolle más cuerpo y crezca en tamaño, así como que se aplique una fiscalidad que apueste por las empresas de tipo medio que acometan el riesgo de nacer o desarrollarse, siguiendo el modelo de los últimos cambios de la fiscalidad estadounidense.

También ha apostado por facilitar mecanismos de financiación a la hora de incentivar el aumento de tamaño de la industria: “Una de las medidas más potentes para adquirir tamaño es la financiación -ha dicho-. Necesitamos instrumentos para que las empresas de tamaño intermedio la encuentren. Los industriales saben cómo crecer, pero lo hacen al ritmo que su capacidad financiera lo permite”.

“En fiscalidad, tenemos un reto muy singular -ha comentado Dorronsoro-. La fiscalidad es la prueba del algodón. Estados Unidos ha dado un salto adelante en fiscalidad y no sé a qué estamos esperando. Es importante apostar por una fiscalidad con esquemas a varios años vista”.

Ana Ursúa, por su parte, ha considerado que “el tamaño de nuestra industria es uno de los grandes retos porque impide la mejora de la competitividad. Echamos en falta más multinacionales de origen español”.

 

Pardo reclama reducir la carga regulatoria en Europa

El miembro del Comité Ejecutivo de AMETIC resalta sobre la importancia de los objetivos de la Década Digital europea y pide impulsar la competitividad económica y crear alianzas “sólidas” con terceros países de confianza

El miembro del Comité Ejecutivo de AMETIC, Luis Pardo, ha reclamado hoy la necesidad de reducir la carga regulatoria en la Unión Europea. “Hemos sufrido un tsunami regulatorio. De hecho, actualmente existen más de cincuenta expedientes legislativos solo en el ámbito digital. Ya no se trata por tanto de crear nueva regulación, sino de aplicar de forma eficiente, ágil y simple para las empresas la legislación creada en el anterior ciclo”, ha precisado.

Tras recordar que “el 53% de nuestra legislación ha sido europea durante los últimos cinco años”, Pardo ha incidido en que “la innovación, la tecnología y el desarrollo de todo el talento han sido y seguirán siendo una prioridad en una Europa fuerte y democrática que tiene sus pilares en la libertad, la igualdad de derechos y los estados de derecho”.

Además de reivindicar un “mayor equilibrio entre la innovación y el marco regulatorio”, el representante de AMETIC ha recalcado también la importancia de impulsar la competitividad económica con un foco digital hacia sectores estratégicos, así como la necesidad de crear alianzas sólidas con terceros países de confianza porque, tal y como ha señalado, “hay más de 300 materias primas que no están en Europa y que son necesarias para la digitalización de la industria”.

En parecidos términos se ha expresado la directora general de Digital Europe, Cecilia Bonefeld-Dahl, quien ha coincidido con Pardo en solicitar una simplificación y reducción de la carga regulatoria de aquí a 2029.

En su intervención por videoconferencia, la dirigente comunitaria también ha agradecido el papel de la patronal digital española para impulsar el proceso de transformación digital. “Sin digitalización no hay futuro para los ciudadanos europeos”, ha remachado.

Por su parte, el country coordinator y directorate-general for Communications Networks, Content and Technology Digital Decade Coordination de la Comisión Europea, Javier Alba Gallardo, ha centrado su intervención, igualmente emitida por videoconferencia, en destacar las metas y objetivos de la Década Digital dentro de la Comisión Europea.

En este sentido, y tras explicar que las primeras se resumen en cuatro decisiones –población digitalmente cualificada, infraestructuras seguras y transformación digital de las empresas y de los servicios públicos– Alba ha enumerado los principales objetivos a alcanzar por esta iniciativa en 2030, entre los que ha citado que el 20% de los europeos sean especialistas TIC y obtener un mayor número de graduados en este ámbito, que el 80% de los adultos sea capaz de utilizar la tecnología, o que Europa produzca el 20% de los semiconductores en el mundo, entre otros.

Asimismo, ha indicado que también se persigue que tres de cada cuatro empresas utilicen big data, cloud e inteligencia artificial, o que el 90% de las pymes tengan un nivel de intensidad digital básico.

Según ha detallado, el proceso para la revisión de estos y el resto de los objetivos se abrirá el próximo año para, en 2026, redefinirlos en función de los logros alcanzados.

Finalmente, ha recordado que todos los países han presentado a la Comisión Europea sus hojas de ruta nacionales con las principales políticas para la consecución de estos objetivos digitales y se ha referido, más en concreto, a la presentada por el Gobierno de España de la que, ha dicho, contiene 67 medidas con un desembolso estimado de 33.000 millones de euros. “La Comisión [Europea] está satisfecha con este documento”, ha rematado.

 

Administración, centros tecnológicos y empresas resaltan la importancia de la cooperación para innovar

Representantes de diferentes comunidades autónomas comparten la necesidad de impulsar la colaboración en acción

Dirigentes de la Junta de Andalucía, de centros tecnológicos públicos y privados y de empresas resaltan la importancia de cooperar para impulsar la innovación en España

Diferentes responsables de entidades y empresas públicas y privadas han querido hacer suyo el lema de este encuentro de AMETIC y han apelado a la importancia de la colaboración en acción.

Así lo han puesto de manifiesto el secretario general de la Consejería de Industria, Energía y Minas de la Junta de Andalucía, Cristóbal Sánchez; la directora general del Instituto Tecnológico de Aragón (ITA), Esther Borao; el consejero delegado de TST Systems (Grupo Celestia), Francisco Alcalá; y el director general Corporativo y de Operaciones de EUREC, AT, Xavier López; durante la mesa que ha abordado la innovación colaborativa traccionada por las empresas: el caso de INNOVA IRV y el Plan CRECE.

Una opinión consensuada de la que también ha participado el director del Parque Tecnológico de Andalucía (Málaga Tech Park), Felipe Romera, quien, en su calidad de moderador, ha defendido que “hay que cambiar el país en innovación”.

Precisamente, en ese propósito Romera ha justificado la creación del Instituto Ricardo Valle de Innovación INNOVA IRV, una institución privada con apoyo público fundada en enero de 2022 con la que hoy colaboran centros y empresas tecnológicas de todo el país desde la premisa, según ha apuntado, de hacer “grandes proyectos de cooperación de las empresas con las universidades”.

Así, ha definido a esta fundación como un proyecto “muy ambicioso de transformación del sistema de innovación español que, ha juzgado, “está en una situación muy débil”.

Sánchez, por su parte, ha explicado las líneas generales del Plan CRECE 2027, una planificación industrial de la Junta de Andalucía que pretende poner el foco en el fomento de actividades industriales de alto valor añadido.

“La política industrial de Andalucía es ambiciosa y proactiva. Tenemos hambre de industria”, ha destacado antes de asegurar que la comunidad andaluza quiere diferenciarse como región industrial porque dispone de “enormes recursos basados en su tejido industrial, el talento y sus numerosos recursos naturales”.

En su exposición, este responsable público que ha defendido que en INNOVA IRV “hay que estar”, ha centrado en cuatro los objetivos de este plan: impulsar un ecosistema industrial por la digitalización, la fabricación de productos y de servicios digitales y la puesta de la industria digital al servicio de los sectores estratégicos, entre los que ha citado el aeroespacial y el energético.

López, por su parte, ha explicado que EURECAT es un centro de investigación cuya misión principal es acelerar la innovación en las empresas. Se trata, según ha indicado, de un proyecto nacido en 2015 que cuenta con cerca de 800 trabajadores repartidos por once centros en Cataluña y sedes en Madrid, Málaga y Latinoamérica y 2.000 clientes.

“EURECAT es un modesto ejemplo de la colaboración en acción que define estas jornadas”, ha recalcado.

Asimismo, ha sostenido que “hablamos mucho de los ecosistemas de innovación, pero no predicamos tanto”. Por ello, ha pedido que las empresas y emprendedores estén en el centro. “Debemos compartir objetivos y cooperar. Y en INNOVA IRV se da esa alineación para que el ecosistema innovador sea más fuerte y pueda crecer”, ha subrayado.

En su intervención, Borao, quien también ha coincidido en la importancia de la colaboración, ha aludido al carácter público del Instituto de Tecnológico de Aragón creado por el gobierno de la comunidad para dar servicio a las empresas.

“Como centro de investigación aprendemos de las nuevas tecnologías y las estrategias digitales que se desarrollan en Europa para tratar de implantarlas en Aragón y dar así cumplimiento a nuestra filosofía de aprende, transforma, identifica” (ITA, al revés).

Por último, el CEO de Celestia TST, empresa tecnológica con presencia en diferentes países dedicada a las comunicaciones, ha defendido que “solo tenemos futuro desde la colaboración”, en alusión a su participación en INNOVA IRV. Más en concreto, ha asegurado que “sin colaboración no existe posibilidad de llegar al campo de la microelectrónica en el que su compañía desea introducirse.

 

Félix Barrio, director de INCIBE: “La inversión en ciberseguridad no va a acabar porque es una palanca de innovación vital para nuestra supervivencia”

El director general del Instituto de Ciberseguridad cree que el sector se encuentra ante la mayor oportunidad de desarrollo tecnológico

“La inversión en ciberseguridad no va a acabar porque es una palanca de innovación vital para nuestra supervivencia”. Así lo ha manifestado Félix Barrio, director general de INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad), quien ha intervenido este lunes en el 28 AMETIC Encuentro de Empresas Digitales y Telecomunicaciones que se está celebrando en Santander, en el marco de los cursos de verano de la UIMP.

“No hablemos de los incidentes en seguridad -ha indicado Barrio a los presentes-, hablemos de la ciberseguridad como oportunidad que está determinando la mayor actividad de innovación tecnológica del sector. Eso ha sido gracias a la cooperación”.

Barrio ya intervino en 2023 en la anterior edición del encuentro de AMETIC y, un año después, ha revalidado sus datos y pronósticos. A su juicio, España se encuentra en una situación de liderazgo por una serie de hechos acaecidos en 2024 que confirman las buenas expectativas anteriores. En cuanto a la financiación europea, ha asegurado que el fin del Next Generation no será el fin de la inversión de la UE en España.

“Ha habido una serie de novedades importantes que marcan el camino -ha señalado-. En primer lugar, es el éxito del programa de apoyo a la innovación de Next Generation y el de Kit Digital, con agentes digitalizadores que incorporan en su portfolio la ciberseguridad. Hemos invertido 204 millones de euros en 140 proyectos que es el mayor programa de inversión en nuevos servicios digitales de ciberseguridad”

En segundo lugar, Barrio ha dado cuenta de la selección de INCIBE como aceleradora de proyectos para reforzar la seguridad digital. “La OTAN eligió a INCIBE como aceleradora en ciberseguridad para España -ha dado cuenta-. Estamos hablando de uno de los programas de inversión en que podemos liderar el retorno en ciberseguridad”.

Otro elemento de evolución positiva es el aumento del número de investigadores universitarios que se dedican al campo de la ciberseguridad.

“La red académica se ha reforzado con 20 nuevas cátedras universitarias y una inversión de más de 60 millones de euros que ha aumentado un 30% el número de investigadores. Estamos por encima de 800 investigadores de altísimo nivel, que se benefician de la cooperación con la empresa privada”, ha informado.

Según ha dicho, el futuro discurrirá por una senda similar: nuevas convocatorias, inversión europea e interés del sector privado.

“La inversión en ciberseguridad no va a acabar porque es una palanca de innovación vital para nuestra supervivencia –ha insistido–. Por lo tanto, tenemos que estar preparados. En Europa ya hay un programa de 1.800 millones de euros de inversión previsto hasta 2027”.

Otro programa que se acaba de cerrar es el Retech Seguridad, destinado al desarrollo de ecosistemas de seguridad en el que se han implicado todas las comunidades autónomas del país. “Hemos cerrado con todas las autonomías una inversión conjunta de más de 170 millones de euros, que nos van a permitir ampliar una estrategia de ciberseguridad, especializada en los territorios”, ha comentado al respecto.

Además, está el interés del sector privado. Próximamente, tendrá lugar en León el International Business Forum (Enise), que ya cuenta con la participación de 17 países, 70 organizaciones que vienen a hacer compras tecnológicas por valor de 200 millones de euros, a lo que hay que sumar 2.000 millones dispuestos a ser invertidos por fondos de inversión.

“Tenemos un año que nos permite el máximo optimismo de que esto va a más y mantener la velocidad adquirida”, ha concluido el director general de INCIBE.

 

El mayor desafío de la ciberseguridad es la concienciación de los usuarios, según varios expertos

Los participantes en la mesa sobre los retos futuros de esta actividad coinciden en el peligro real y constante de la ciberdelincuencia

“El mayor desafío de la ciberseguridad es la concienciación de los usuarios”. Así lo ha destacado el CEO y fundador de SIRT, David Garriga, y lo han corroborado el resto de los participantes en la última mesa de esta primera jornada del 38 Encuentro AMETIC de la Economía Digital y las Telecomunicaciones, dedicada a analizar los retos de la ciberseguridad y los nuevos escenarios de protección.

En el debate, conducido por la presidenta y fundadora de WOMEN4CYBER Spain, Eduvigis Ortiz, y que ha contado también con la participación de la subdirectora de Relaciones Institucionales en Europa de Xiaomi, Natalia Ares; y del director general de INCIBE, Félix Barrio, los ponentes ha ahondado en el creciente riesgo que representan estos ataques para la seguridad operativa de empresas y particulares.

“El error es pensar que estos ciberataques no me van a pasar a mí”, ha reflexionado Garriga, quien ha insistido en la necesidad de generar “los máximos hábitos de concienciación para estar atentos ante estas amenazas”.

En materia de innovación, el fundador de SIRT ha anunciado que su compañía trabaja en dos proyectos tecnológicos ‘made in Spain’, como son la oficina de seguridad con el que pretenden “democratizar” la ciberseguridad, y un segundo orientado a habilitar la economía del dato y cómo se puede gestionar con inteligencia artificial.

Para Ares, por su parte, el mayor reto de su compañía es ofrecer productos “seguros garantizando la privacidad de los usuarios”, un objetivo para el que ha explicado que Xiaomi ha incorporado “las últimas prácticas en ciberseguridad”.

Asimismo, ha hecho referencia a la próxima ley de ciberresiliencia, que ha anunciado seguramente será aprobada en octubre, que pretende garantizar la seguridad de los productos conectados, además de incorporar reglas para la vigilancia del mercado, fijar las condiciones para los fabricantes y contar con evaluaciones de seguridad.

En este sentido, la presidenta y fundadora de WOMEN4CYBER Spain, quien ha iniciado el debate reclamando “atraer talento femenino a la ciberseguridad, un sector en el que actualmente solo el 30% son mujeres, ha compartido que “la regulación es sin duda un acelerador para que los usuarios estén al día” en esta materia.

Barrio, por último, ha querido poner rostro a los ataques cibernéticos y ha asegurado que 40.700 equipos se han visto comprometidos en las redes en Cantabria. “El problema es que hay muchos usuarios que desconocen que están expuestos a organizaciones delictivas que están muy bien preparadas”, ha enfatizado.

Además, el director general de INCIBE ha avanzado que el año próximo el 3% de todos los productos digitales conectables a la red tienen que estar monitorizados por las autoridades con lo que, por tanto, se va a redoblar la capacidad de vigilancia del mercado.

Finalmente, Ortiz ha querido cerrar el debate poniendo en valor la colaboración público-privada y lanzando un mensaje: “la ciberseguridad es una responsabilidad compartida”.

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